Hoy nos vamos a salir de la metodología Suzuki para hablar un poco de ciencia. Esta semana durante una clase surgió el tema de, porque era bueno estudiar música. Sabía algo del tema porque había leído varias investigaciones y en todas llegaban a la conclusión que l@s niñ@s que estaban bajo la influencia de la música ya fuera escuchándola o aprendiéndola, tenían mejores resultados académicos.
Pero todavía quería más, así que me puse manos a la obra y me lancé a investigar en libros y artículos. Y llegue a la siguiente conclusión, quiero avisar que es lo que yo he comprendido después de leer varios artículos y de estar informandome, y puede ser que en ciertos aspectos la terminología no sea la correcta, pero si alguien ducho en el tema desea hablar o corregir lo que sea, tengo las puertas abiertas a recibir todo tipo de críticas y recomendaciones.
Al tema:
Primero para comprender mejor, vamos a definir lo que son habilidades cognitivas:
Éstas, son las que facilitan el conocimiento, aquellas que operan directamente sobre la información: recogiendo, analizando, comprendiendo, procesando y guardando información en la memoria, para, después, poder recuperarla y utilizarla dónde, cuándo y cómo convenga. En resumen es aquella habilidad que nos permite comprender mejor el mundo, nos permite asimilar las cosas, comprender las metáforas, seguir y aprender un lenguaje, resolver operaciones matemáticas… etc.
Al escuchar, y al practicar música, mejoramos nuestra habilidad cognitiva, mejoramos la habilidad para comprender el mundo que nos rodea.
Y como lo hace, como mejorar esta habilidad…
El cerebro está compuesto por materia blanca, esta materia la podemos imaginar como si fuera un tejido cuando lo vemos de cerca con millones de”hilillos” (axones) que son las conexiones que se tienen en el cerebro y digamos por donde «circula la información». Estos “hilillos”(axones), están rodeados o inmersos en un “agua”(moléculas de agua extracelulares) . Si el cerebro está sano las medidas de este «agua» son todas uniformes y altas (anisotropía fraccional). Es decir el “agua” está repartida de forma uniforme y su movimiento es uniforme. Si hay algún problema, este «agua» no es uniforme y se producen, diríamos «huecos» en ella (el movimiento es más aleatorio).
NOTA: he puesto las comillas porque no se dice es así, es la manera, creo, que puede comprenderse mejor. Lo que está entre paréntesis es el nombre científico real.
Cuando un niño recibe educación musical, se pide a su cerebro que complete ciertas tareas, éstas, involucran habilidades sociales, de la emoción, la cognición (comprensión), motoras y auditivas, que parecen activar estas diferentes áreas en el cerebro, y mejoran la zona de los «hilillos» que hemos hablado antes, haciendo que se creen más conexiones entre los dos hemisferios del cerebro.
Es decir, en los niños que han estudiado música, cuando se mide esa “agua” del cerebro, se reciben datos más altos (anisotropía fraccional). Hay más densidad de esta agua lo que permite comunicarse mejor a los “hilillos” y mejoran la capacidad cognitiva, la capacidad de comprender la habilidad de comprender mejora creándose como he escrito antes más conexiones en el cerebro.
Esto quiere decir que nuestros hijos serán más inteligentes? No.
Quiere decir que serán capaces de comprender mejor las cosas, que serán más sensibles a su alrededor que podrán empatizar mejor, esto nos permite ponernos en el sitio del otro.
Y hasta aquí el resumen de lo que sucede en el cerebro, como veis está explicado de una forma muy chabacana pero espero sirva para comprender mejor porque es tan importante estudiar música.
Un Saludo.
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